Diputados reflejan el quiebre del Senado y complican al Gobierno

La Cámara baja comienza a replicar el clima adverso que se vivió en el Senado, con señales claras de una oposición fortalecida que anticipa nuevos desafíos legislativos para Javier Milei.
El Gobierno de Javier Milei enfrenta una nueva advertencia parlamentaria. Tras las cinco derrotas sufridas en el Senado, la Cámara de Diputados empezó a mostrar síntomas similares, que anticipan un segundo semestre aún más tenso para el oficialismo. La oposición logró en la Comisión de Presupuesto dos dictámenes clave: una nueva ley de financiamiento universitario y la declaración de la emergencia pediátrica nacional, que además restituye las residencias médicas eliminadas en el Hospital Garrahan.
Ambos dictámenes fueron forzados por emplazamientos votados el 2 de julio, en una sesión en la que 161 y 164 diputados respaldaron las mociones, obligando al presidente de la comisión, José Luis Espert, a tratarlos. Aunque los proyectos recién llegarán al recinto en agosto, la contundencia del apoyo opositor anticipa una nueva pulseada que recuerda al conflicto por la ley universitaria del año pasado, que Milei terminó vetando y blindando con el apoyo justo en Diputados.
El presidente ya anticipó que no renovará las facultades extraordinarias de la Ley Bases, pero la realidad política cambió: ya no cuenta con los mismos respaldos. Esta semana, además, los gobernadores —de todos los signos políticos— se unieron para impulsar en el Senado dos leyes: una que obliga al reparto de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y otra que afecta la recaudación del Impuesto a los Combustibles. Ambas superaron ampliamente los dos tercios necesarios y ahora esperan tratamiento en Diputados.
El Senado también aprobó otras tres leyes con fuertes mayorías: un aumento para los jubilados, la extensión de la moratoria previsional y una emergencia en discapacidad. Milei ya avisó que las vetará, como hizo en 2024 con otras normas similares. Sin embargo, la oposición empieza a mostrar capacidad para revertir esos vetos, como sucedió con la emergencia en Bahía Blanca, cuyo rechazo cosechó 51 votos en la Cámara alta, superando también los dos tercios.
Mientras el oficialismo confía en su alianza con el PRO para mantener el llamado “tercio de bloqueo” en Diputados, el malestar entre los radicales y los partidos provinciales podría inclinar la balanza en su contra. Lo que parecía una tregua legislativa terminó transformándose en un frente ampliado de oposición, que ahora actúa en ambas cámaras y amenaza con neutralizar los resortes institucionales que le permitieron a Milei avanzar durante su primer año de gobierno.