La ciudad de Buenos Aires sigue conmocionada tras conocerse los detalles de una tragedia familiar ocurrida en un departamento de Villa Crespo, donde una mujer asesinó a su esposo y a sus dos hijos adolescentes antes de quitarse la vida.
El caso, que generó una profunda impresión en la sociedad, sumó en las últimas horas un nuevo elemento estremecedor: el contenido de una carta hallada en la escena del crimen.
Laura Leguizamón, de 51 años, escribió en una hoja manchada de sangre frases confusas y cargadas de angustia: “Fue mucho. Los amo. Lo siento”, “Íbamos a la calle”, “Todo mal, muy perverso” y “Les arruinaba la vida”. Los peritos forenses señalaron que el trazo irregular, las letras mezcladas y el desorden del texto reflejan un estado mental profundamente alterado.
Además, el escrito incluía claves que podrían pertenecer a los celulares de su esposo e hijos, y una referencia a su propio teléfono: “Mi tel es ‘L’”. Una mancha de sangre cubría parcialmente la palabra “calle”, acentuando el dramatismo de la nota.
Según la investigación, Leguizamón utilizó una cuchilla de cocina para atacar a su pareja con múltiples puñaladas. Luego fue hasta la habitación donde dormían sus hijos, y los atacó con la misma violencia. Uno de los adolescentes intentó escapar, pero fue alcanzado y asesinado en el comedor. Finalmente, la mujer volvió a la habitación matrimonial, se acostó junto al cuerpo de su esposo, se provocó una herida mortal y murió en el baño tras arrastrarse gravemente herida.
La justicia continúa investigando los antecedentes del caso y el contexto psicológico de la autora para intentar entender qué llevó a esta madre a cometer un acto de semejante brutalidad. Mientras tanto, el barrio y toda la ciudad permanecen en estado de shock ante uno de los episodios más oscuros de los últimos tiempos.