El gobernador Ricardo Quintela afirmó que la provincia no puede otorgar incrementos salariales debido a la reducción de transferencias por parte del Gobierno Nacional, lo que mantiene paralizadas las actualizaciones para trabajadores estatales.

La decisión del Gobierno Nacional de contener y demorar las transferencias hacia las provincias generó un impacto directo en La Rioja, donde el Ejecutivo provincial aseguró que no está en condiciones de anunciar aumentos salariales para los empleados públicos. La situación fue abordada por el gobernador Ricardo Quintela durante una entrevista radial en Radio Memoria Streaming, donde reiteró la gravedad del escenario financiero.

El mandatario explicó que la provincia afronta una deuda significativa por parte de Nación, lo que limita por completo la posibilidad de actualizar los haberes. “Para nosotros es imposible un aumento de sueldo; nos están debiendo más de mil millones de dólares”, señaló Quintela, al remarcar que la falta de recursos nacionales afecta el funcionamiento general del Estado y las medidas salariales previstas.

El gobernador sostuvo que el Gobierno provincial continúa gestionando soluciones y reclamando los fondos correspondientes, aunque insistió en que el margen de acción es muy limitado sin la restitución de las transferencias. Adelantó que, ante cualquier novedad o avance sobre la deuda o el financiamiento, será informado oportunamente.

La administración riojana espera una respuesta del Gobierno Nacional mientras busca sostener el funcionamiento de áreas esenciales y contener el impacto de la crisis sobre los trabajadores.

Redacción Infolar y Digital Norte