Rusia responde al ultimátum de Trump y abre una nueva fase de tensión global

El expresidente estadounidense y candidato republicano Donald Trump amenazó con duras sanciones si no se alcanza la paz en 50 días. Desde Moscú tomaron nota y advierten que analizarán cada palabra del mensaje antes de una reacción oficial de Putin.
La tensión entre Rusia y Estados Unidos escaló una vez más tras las recientes declaraciones de Donald Trump, quien lanzó un ultimátum al Kremlin en un intento por forzar el fin del conflicto bélico en Ucrania. En una reunión con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, celebrada este lunes en la Casa Blanca, Trump advirtió que impondrá aranceles del “100 por ciento” si no se logra un acuerdo de paz en los próximos 50 días.
La amenaza fue directa: “Vamos a aplicar aranceles muy severos si no llegamos a un acuerdo en 50 días”, sostuvo Trump desde el Salón Oval, sumando un nuevo elemento de presión internacional al conflicto iniciado en febrero de 2022. Además, confirmó que la OTAN comprará armamento estadounidense, incluyendo baterías antimisiles Patriot, para ser entregado a las fuerzas ucranianas en el frente de batalla.
La reacción del Kremlin no tardó. Dmitri Peskov, portavoz de Vladimir Putin, respondió con cautela y sin cerrar ninguna puerta: “La declaración del presidente de Estados Unidos es muy seria. Parte de ella iba dirigida personalmente al presidente Putin. Sin lugar a dudas, necesitamos tiempo para analizar lo que se ha dicho en Washington”. Peskov añadió que Putin decidirá si responde públicamente, pero por ahora optan por la prudencia.
Respecto al anuncio de armamento a través de la OTAN, el funcionario ruso fue tajante: “Ese tipo de decisiones no son señales de paz para Ucrania, sino todo lo contrario. Son una luz verde para seguir la guerra”.
El conflicto suma así un nuevo capítulo diplomático, mientras el Financial Times reveló que Trump habría mantenido una conversación telefónica con Volodimir Zelenski el pasado 4 de julio. Según el medio británico, el expresidente le preguntó al mandatario ucraniano si estaba dispuesto a atacar Moscú y San Petersburgo. “Por supuesto, si me dan las armas”, habría respondido Zelenski.
Estas declaraciones, filtradas en plena campaña electoral estadounidense, forman parte de la estrategia del republicano para forzar una negociación con el Kremlin. Según él, “hay que hacerles sentir dolor a los rusos” para que accedan a un cese del fuego.
Trump, que insiste en que puede terminar la guerra “en 24 horas”, dijo en una entrevista con la BBC que está “decepcionado” con Putin, aunque aclaró que “aún no ha terminado con él”. Durante la misma jornada, en un tono provocador, sostuvo: “Putin engañó a Clinton, a Bush, a Obama, a Biden; a mí no”.
Por ahora, Moscú se mantiene en silencio respecto a una eventual mesa de negociación en Estambul, mientras crecen las señales de escalada en lugar de distensión. Europa, en tanto, observa el movimiento con ambigüedad: según Peskov, “quieren la paz pero actúan como si buscaran más guerra”.
Con esta nueva pulseada diplomática entre dos potencias, el tablero geopolítico se vuelve aún más incierto.