Argentina implicada en el envío de armas que alimentó el golpe en Bolivia

El exembajador Ariel Basteiro presentó su libro en la Feria del Libro junto a Nicolás Trotta Víctor Hugo Morales y Luciana Bertoia donde reveló detalles inéditos del contrabando de armas durante el gobierno de Macri.

En una sala colmada en la Feria del Libro, el exembajador argentino en Bolivia Ariel Basteiro presentó Radiografía de una canallada, una obra que reconstruye con pruebas y testimonios el envío ilegal de armamento argentino que apoyó el golpe de Estado en Bolivia en 2019, durante el gobierno de Mauricio Macri. El libro, publicado por el Grupo Octubre, fue acompañado en su presentación por el exministro Nicolás Trotta, el periodista Víctor Hugo Morales y la periodista Luciana Bertoia.

La obra expone cómo el gobierno de Macri, con Patricia Bullrich al frente del Ministerio de Seguridad, facilitó material bélico a las fuerzas golpistas que derrocaron a Evo Morales en noviembre de 2019. “Ese cargamento de municiones fue fundamental para reprimir al pueblo boliviano”, sostuvo Basteiro, y agregó que el operativo se realizó en secreto, con un avión Hércules de la Fuerza Aérea Argentina que despegó la noche del 12 de noviembre desde el Aeropuerto de El Palomar, conocido por su baja supervisión.

Durante la presentación, Basteiro rindió homenaje a las víctimas del golpe, entre ellas al periodista argentino Sebastián Moro, asesinado en Bolivia el 16 de noviembre de 2019. “Sebastián fue la primera víctima del golpe”, expresó conmovido, y recordó también a Johnny Mamani, un joven boliviano muerto en la represión en Senkata. “Una bala en su garganta, quizás de las que mandó Bullrich”, dijo el autor, apuntando a la responsabilidad del exgobierno argentino.

Nicolás Trotta calificó el libro como un aporte esencial para la memoria latinoamericana. “Es un testimonio valiente que documenta una herida abierta en la región”, afirmó. Además, criticó el silencio judicial en Argentina respecto al contrabando de armas. “Si no avanza la Justicia acá, este libro debe ayudar a que avance en Bolivia”, sentenció.

Luciana Bertoia, quien investigó la causa junto a Felipe Yapur, fue contundente al señalar la pasividad del Poder Judicial. “Se aplicó cronoterapia, como decía Fayt, para que la causa quede dormida”, comentó, y destacó como evidencia clave una carta de agradecimiento de la Fuerza Aérea Boliviana al gobierno argentino por la entrega de armamento.

Por su parte, Víctor Hugo Morales enmarcó los hechos dentro de un plan continental. “Esto no fue solo contra Evo Morales, fue contra uno de los procesos sociales más notables del mundo”, afirmó. También resaltó el rol del entonces presidente electo Alberto Fernández y del gobierno de México, quienes colaboraron para salvar a Evo y sus funcionarios. “Ese fue su mejor momento. Le salvó la vida a Evo mientras muchos decían que no había habido golpe, sino sucesión constitucional”, recordó el periodista.

La presentación fue más que un acto literario: fue una denuncia documentada que busca justicia en una de las páginas más oscuras de la política exterior argentina.